Redcheq sacó las cuentas para verificar un trino del exalcalde y candidato, en el que compara su administración en la capital antioqueña con la actual de Daniel Quintero.
El pasado 19 de agosto, Federico Gutiérrez, el exalcalde y actual candidato a la Alcaldía de Medellín por el partido Creemos, a través de su cuenta en la red social X, dijo que “a junio de 2023 se presentó la desnutrición crónica infantil más alta en la historia de la ciudad. Los niños y niñas están aguantando hambre. Esta administración tuvo 8 billones de pesos más de presupuesto que la nuestra, la pregunta que nos hacemos todos es ¿qué hicieron con la plata de la comida de los niños?”.
Desde Redcheq, verificamos los dos datos de esta afirmación: primero, si a junio de 2023 se presentó la desnutrición crónica infantil más alta en la historia de Medellín y segundo, si la administración de Daniel Quintero tuvo 8 billones de pesos más de presupuesto que la administración de ‘Fico’.
La cifra de la desnutrición crónica
Consultamos a Gutiérrez y a su comunicadora para saber de dónde sacó el dato de que “a junio de 2023 se presentó la desnutrición crónica infantil más alta en la historia de la ciudad”, pero no recibimos respuesta.
Quien sí nos respondió fue Camila Gaviria, actual candidata al Concejo por el Partido Creemos y exdirectora durante su administración del programa Buen Comienzo (el encargado en la ciudad de promover el desarrollo en los niños menores de 5 años). Ella nos indicó que la cifra provenía del último Seguimiento al Plan Indicativo publicado en junio de 2023.
En primer lugar, es importante aclarar que la desnutrición crónica infantil se mide por el retraso en la talla del crecimiento en los niños. El estándar de medición internacional es en niños menores de 5 años, que corresponden a la primera infancia.
Sin embargo, a lo largo de los años entes públicos y privados han medido la desnutrición crónica infantil también hasta los 6 años y hasta los 2 e incluso de los 6 a los 10 o los 13 años. Un ejemplo de esto es la Encuesta Nacional de la Situación Nutricional en Colombia, liderada por el Instituto de Bienestar Familiar, que no se ejecuta desde 2015.
En Medellín, las cifras oficiales de desnutrición crónica las reporta el SENIN (base de datos del Seguimiento Nutricional Infantil) y las replican la Alcaldía, en el Seguimiento al Plan Indicativo, y Medellín Cómo Vamos, una alianza privada que, entre otras cosas, analiza las condiciones de vida de la Primera Infancia basándose en los datos que brindan dependencias oficiales como la Secretaría de Salud.
Para junio de 2023, el último Seguimiento al Plan Indicativo reportó que el porcentaje de la desnutrición crónica infantil en Medellín corresponde al 9,8% de los niños. Estos datos fueron sacados del SENIN, donde identificaron a 77.347 niños y niñas menores de 5 años que representan el 46% de la población y de los cuales 7.544 fueron diagnosticados.
Desde Redcheq contactamos a Quintero para contrastar la información publicada por Gutiérrez y, a través de una llamada telefónica, nos dijo que no se puede tener en cuenta la cifra de desnutrición crónica de junio porque la medición tiene validez apenas cuando se hayan reportado todos los niños tamizados al final del año. Esto ocurre porque, según el alcalde, cuando hay un caso de desnutrición crónica se activan las rutas de atención y los casos se reportan inmediatamente y es solo hasta diciembre cuando se reportan los niños sanos.
Posteriormente, el mandatario local nos dijo que, a junio de 2023, han reportado solo 39.000 de los 105.000 niños que deben ser tamizados este año, pero al revisar esa cifra nos dimos cuenta de que no encaja con la que la Alcaldía, a través del Seguimiento al Plan Indicativo, había publicado, o sea, los 77.347 niños reportados. Ante esto, cuestionamos al funcionario para saber por qué la información que nos compartió era diferente a la oficial y nos dijo que iba a solicitarle a su equipo que le enviaran la actualizada.
Quintero corrigió el dato y nos dijo que, a junio de 2023, la base de datos tenía una actualización de 45.466 niños medidos, una cifra que, a pesar de ser más alta que la que dio de forma inicial, sigue sin ser compatible con la reportada oficialmente por la Alcaldía. Ante esto, le citamos las cifras del Seguimiento y él nos cuestionó para saber cuándo fue la última vez que revisamos el dato.
Luego, tratamos de ingresar al sitio web de la Alcaldía para enviarle el documento del que hablábamos y encontramos que ya no se podía acceder a los informes de los planes indicativos.
Esta situación se prolongó por cuatro días, en los que no se podía entrar especialmente al informe de junio. Quintero dijo que “parece que hay una información duplicada en la plataforma y están revisando si fue con mala intención” y que “efectivamente hay errores en la base de datos, pero por ahora el diagnóstico es el mismo y hasta que no se cierre el informe es imposible saber los resultados de este año”. Adicional a esto, él calcula que las cifras de desnutrición crónica en la ciudad para diciembre estarán en 7,2%.
Para Lorena Mancilla, profesora e investigadora del Instituto de Nutrición y Dietética de la Universidad de Antioquia, no hay motivos para no comparar ambos informes (el de corte a junio y el de corte a diciembre) porque miden el mismo indicador aunque correspondan a meses diferentes. Por el contrario, esto mismo es lo que posibilita el comparar la variabilidad de la desnutrición crónica infantil a lo largo del tiempo.
Pero volvamos a la afirmación chequeable que fue la que Federico Gutiérrez compartió por Twitter: “a junio de 2023 se presentó la desnutrición crónica infantil más alta en la historia de la ciudad”. Su frase es cierta si tenemos en cuenta solo el estándar de medición internacional, el retraso en talla de menores de 5 años, contando el informe de 2023 con corte a junio, que sí es comparable según la docente aunque Quintero dice que no.
Sin embargo, tiene un pero y es que, con los otros estándares de medición (los niños menores de 2 años y los menores de 6 años), encontramos que, históricamente, esa no es la cifra de desnutrición crónica infantil más alta en la ciudad.
En el archivo histórico de publicaciones de Medellín Cómo Vamos encontramos el Informe de la Primera infancia 2009 - 2016 elaborado con datos de la Encuesta Nacional de la Situación Nutricional en Colombia. La gráfica 24 muestra que la desnutrición crónica infantil en niños menores de 6 años en 2011 fue de 10,8%. Además, en 2012, en los niños menores de 2 años, la tasa fue de 9,9%. Lo que pasa es que la diferencia en el límite de edad no permite hacer una comparación exacta.
Por otro lado, Medellín Cómo Vamos, en su cuenta oficial de Twitter, hizo un hilo donde publicó las cifras de desnutrición crónica infantil entre los niños menores de 5 años de 2012 a 2022. Si comparamos la de junio de 2023 (9,8%), esta sí sería la más alta reportada, seguida muy de cerca por la de 2012, con un 9,5%.
Así, calificamos como ‘verdadero pero…’ la afirmación de Federico Gutiérrez donde afirma que, a junio de 2023, se presentó la desnutrición crónica infantil más alta en la historia de la ciudad, considerando que la medición oficial lleva registros desde hace una década en menores de 5 años y efectivamente, con esa fecha de corte, ese es el récord. No obstante, hay otras mediciones más antiguas que sí han dado resultados más altos, solo que fueron tomadas en rangos de edad distintos al que usa actualmente el SENIN.
La afirmación de los 8 billones de pesos más de presupuesto
Para saber si la actual administración de Quintero tuvo 8 billones de pesos más que la administración de Gutiérrez, verificamos cuánto fue realmente la ejecución presupuestal de ambas teniendo en cuenta todas las adiciones que se hicieron a lo largo de los años.
Primero, revisamos los informes de ejecución presupuestal históricos durante los años de la administración de Fico (2017, 2018 y 2019) y tomamos el total del presupuesto definitivo para cada año. La cifra de 2016 no tiene registro en esos informes, pero la encontramos como “presupuesto ejecutado” en el Informe de Gestión 2016-2019 publicado por la Alcaldía de Medellín.
Después, revisamos los informes de la ejecución del presupuesto de la administración de Daniel Quintero en los años 2020, 2021, 2022 y 2023, según lo previsto en julio, que es el último reportado hasta la fecha de escritura de este chequeo.
A partir de eso, elaboramos una tabla para cada administración con tres columnas: una para el año, otra para el presupuesto definitivo y otra para el presupuesto ajustado a la inflación de julio de 2023. Esto último es para tener en cuenta la disminución del poder adquisitivo del dinero a lo largo de los años.
Para obtener los datos de la última columna convertimos, en una calculadora de inflación llamada Dinero en el Tiempo, los presupuestos definitivos de los últimos 7 años de Medellín a pesos de 2023. Esa cuenta se basa en el cambio en el IPC (índice de precios al consumidor), o sea la inflación, entre el año respectivo y la actualidad. El resultado fue el siguiente:
Administración Federico Gutierrez | ||
Año | Presupuesto definitivo | Presupuesto ajustado a la inflación de julio de 2023 |
2016 | $4,931,625,000,000 | $7,303,127,111,419.67 |
2017 | $5,758,270,217,837 | $8,174,613,344,623.05 |
2018 | $6,493,502,940,875 | $8,929,017,615,164.11 |
2019 | $6,325,881,684,196 | $8,402,503,031,070.69 |
Total | $23,509,279,842,908 | $32,809,261,102,277.50 |
Administración Daniel Quintero | ||
Año | Presupuesto definitivo | Presupuesto ajustado a la inflación de julio de 2023 |
2020 | $6,468,592,896,662 | $8,380,326,780,752.80 |
2021 | $7,083,128,547,230 | $8,866,591,540,886.24 |
2022 | $7,444,141,535,917 | $8,457,736,624,316.24 |
2023 (julio) | $8,320,169,622,857 | $8,320,169,622,857.00 |
Total | $29,316,032,602,666 | $34,024,824,568,812.30 |
La diferencia en el presupuesto de ambas administraciones es de 5,8 billones de pesos corrientes (sin tener en cuenta la inflación). En dinero constante (con el ajuste por IPC), queda en 1,2 billones de pesos más para la administración de Quintero que para la de Fico
Quintero tiene nominalmente (sin ajustar por inflación) el presupuesto más alto de la historia de la ciudad y, a la fecha de escritura de este chequeo, aún faltan los ajustes presupuestales de sus últimos 4 meses de gobierno. Pese a eso, las dos cifras que dan cuenta de la diferencia frente al de la alcaldía de Gutiérrez son muy inferiores a la de 8 billones planteada por el exalcalde y candidato en X.
Adicional a esto, si tenemos en cuenta el Presupuesto de Inversión por Resultados publicado por la Alcaldía en 2022, encontramos que para ese año la administración de Quintero destinó 200.000 millones de pesos del presupuesto del distrito para la Unidad Administrativa Buen Comienzo, de los cuales 20.000 millones fueron específicamente para el proyecto “Un buen comienzo para la nutrición”, cuyo objetivo era atender de forma especializada a los niños y niñas que presentaban malnutrición por déficit, y otros 20.000 millones de pesos fueron destinados para el mejoramiento de la situación nutricional de madres gestantes, lactantes y niños menores de 6 años.
Por otro lado, en el informe de Inversión por Resultados presentado en 2019, que fue el último año de la administración de Federico Gutiérrez, se destinaron 17.000 millones de pesos para el apoyo nutricional de la primera infancia y 3.000 millones de pesos más para el apoyo nutricional de mujeres gestantes y lactantes. Teniendo en cuenta la inflación hasta 2022, esto equivale a un poco más de 23.000 millones de pesos, casi la mitad de lo que la administración de Quintero tuvo a su disposición para combatir la desnutrición infantil.
Sin embargo, el exalcalde no comparó este rubro específico sino que usó la cifra general del presupuesto de toda la ciudad y, como ya lo vimos, sacó una cuenta que no da. Apegándonos a su afirmación de que “esta administración tuvo 8 billones de pesos más que la nuestra”, calificamos como falso el dato, pues la diferencia es mucho menor, sobre todo si se ajustan los montos de acuerdo con la inflación.
* Este chequeo es producto del ciclo de talleres ‘Cubrimiento de elecciones regionales y fact-checking’ organizado por Consejo de Redacción con el apoyo del Centro Carter.