El mandatario acertó en la información que dio sobre Medellín, pero se equivocó en cifras y análisis en cuanto a Bogotá.
En un hilo publicado en su cuenta de Twitter, el presidente de Colombia Gustavo Petro aseguró que “en 30 años Bogotá no ha construido más cárceles ni aumentado su pie de fuerza, sin embargo, ha disminuido en nueve veces, su violencia. Hace dos días Medellín completó 7 días sin homicidios, nunca antes lo había logrado. El delito disminuye si hay inclusión social (sic)”.
Luego de consultar fuentes oficiales y alternativas y de hablar con expertos, calificamos el trino como discutible, pues tiene dos datos que son mentira, uno que es discutible y solo uno que es verdad. En RedCheq también verificamos otros dos trinos de ese mismo hilo.
Según el equipo de comunicaciones del mandatario, con quien RedCheq se comunicó, las afirmaciones de Petro pertenecen a algunas publicaciones de medios de comunicación hechas entre 2019 y 2021, pero solo nos enviaron el artículo del diario El Tiempo, “En 25 años, Bogotá pasó de 16 a tres homicidios diarios” publicado en enero de 2019 que habla de la tasa de homicidios en 1993 en la capital, pero no menciona nada relacionado con la construcción de cárceles en Bogotá.
Calificamos como discutible la parte del trino que dice que “en 30 años Bogotá no ha construido más cárceles”, pues aunque no se han construido nuevas, sí se amplió la capacidad de la Cárcel Distrital y se puso en funcionamiento un centro de detención transitoria.
RedCheq consultó en la oficina de comunicaciones de la Alcaldía Mayor de Bogotá para verificar la cifra de cárceles construidas en la capital del país durante los últimos 30 años. Respondieron que en las últimas administraciones no se han construido cárceles, pero que en 1999 se amplió y se mejoró la infraestructura de la Cárcel Distrital. Pasó de 450 cupos a 1.028, como se detalla en el documento “Acciones del Distrito en materia de infraestructura para población privada de la libertad” enviado a RedCheq.
En dicho documento, la Alcaldía Mayor de Bogotá también detalla la adquisición de un inmueble en la localidad de Puente Aranda para la operación de un centro de detención transitoria para delitos menores denominado Centro Especial de Reclusión (CER), para atender el problema de hacinamiento en las cárceles que se agravó en tiempos de la pandemia de Covid-19. Actualmente cuenta con 216 nuevos cupos.
Al respecto, Alberto Sánchez, investigador y asesor en temas de seguridad y defensa, dijo a RedCheq que la situación de las cárceles en Bogotá no se puede medir solamente en si han construido o no más centros carcelarios, sino en cómo ha cambiado en los últimos años la atención a los privados de la libertad teniendo en cuenta que la Cárcel Distrital recibió en 2018 la certificación internacional de la Asociación Americana de Correccionales (ACA) que la califica como la mejor cárcel del país, según la Secretaría de Seguridad , Convivencia y Justicia. En ese sentido, Sánchez precisó que este cambio de paradigma para la atención a los privados de la libertad traza una ruta de interés integral que deben tener en cuenta las siguientes administraciones.
El experto se refirió, además, a la diferencia entre la Cárcel Distrital, a cargo de la alcaldía de Bogotá, y las cárceles La Modelo y La Picota, que están bajo la administración del Gobierno nacional, pues aunque han tenido cambios locativos y físicos, el gran problema sigue siendo el hacinamiento, el cual en algunas ocasiones es responsabilidad del Distrito y en otras del Gobierno nacional. Asegura que las últimas administraciones de Bogotá han sabido responder a los problemas con la atención a los privados de la libertad, pero a nivel nacional siguen faltando cárceles y sigue siendo un problema definir quién debe construirlas, si los gobiernos locales, el INPEC o el Gobierno nacional.
¿En 30 años no se ha aumentado el pie de fuerza en Bogotá?
Calificamos esta afirmación como mentira, porque aunque los últimos esfuerzos por aumentar el pie de fuerza en Bogotá no coinciden con las necesidades de la ciudad, encontramos registros de prensa que dan cuenta del aumento del pie de fuerza en Bogotá en distintas administraciones.
Encontramos que durante la alcaldía de Petro, entre 2012 y 2015, la ciudad recibió por lo menos 800 nuevos policías. Que en mayo de 2018, durante el mandato de Enrique Peñalosa, recibió por lo menos 735 policías y que en 2021 llegaron 1.000 nuevos uniformados.
Tres días después de la publicación de su trino, el mismo Petro anunció, junto a la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, el aumento de fuerza en la capital de Colombia en 1.500 hombres este año.
Sánchez, también le explicó a RedCheq que la capital del país no es la única ciudad del país que no tiene el número de policías que necesitaría, pues esa falencia es nacional y que “en todo Colombia se han presentado cambios en la cantidad de uniformados en las ciudades, después de que el Consejo de Estado fallara a favor de pensionar a las personas que cumplian 20 años de servicios en las instituciones de las Fuerzas Armadas, cambiando radicalmente las condiciones sistemáticas de la fuerza pública en las ciudades, teniendo unos impactos pronunciados desde el nivel ejecutivo hasta auxiliares de policía. El pie de fuerza hace falta en Bogotá, pero también en todo el país”.
Finalmente, Sánchez también advirtió que en Bogotá ocurren situaciones particulares, pues la ciudad ha cambiado en términos de convivencia y seguridad, teniendo unos desafíos muy fuertes frente a la atención del crimen organizado, sin el aumento necesario de la fuerza pública y con la Policía con múltiples tareas, que la Alcaldía de la capital podría asumir.
“Bogotá ha disminuido en nueve veces, su violencia”
En el segundo trino del hilo que Petro publicó sobre homicidios y violencia en Bogotá, el mandatario hizo alusión a la reducción en nueve veces, pero en esa frase se refiere específicamente a la disminución de la tasa de homicidios.
La frase que chequeamos fue: “Bogotá, que tenía en 1993 una tasa de 93 homicidios por 100.000 habitantes la ha reducido nueve veces, hoy es del orden de 11”. Calificamos la frase como mentira, pues ninguno de los datos mencionados por Petro se acerca a la realidad, por tanto el cálculo de la reducción de la tasa en nueve veces es falso.
“Medellín completó 7 días sin homicidios, nunca antes lo había logrado”
RedCheq califica esta afirmación como verdad. Según los informes diarios de homicidios en Medellín hasta el 1 de septiembre de 2022, cuando Petro publicó la información, enviados por la alcaldía de esa ciudad a RedCheq, no se presentaron homicidios durante los siete días comprendidos entre el 22 y el 28 de agosto, situación sobre la que esa administración informó en un boletín de prensa.
En este boletín la Alcadía de Medellín explica que, “este logro es posible gracias a la Estrategia Articulada contra el Delito, que, por primera vez en Medellín logra unir los esfuerzos de todas las autoridades para prevenir, investigar y reaccionar de manera efectiva y conjunta ante los casos de homicidio, teniendo apoyo de la mejor tecnología contra el crimen que existe en el país”.
Es importante aclarar que en las declaraciones del alcalde de Medellín, Daniel Quintero, el 29 de septiembre de 2022 al referirse a los homicidios en la ciudad, aseguró que en Medellín habían logrado en varias ocasiones un máximo de cinco días sin homicidios desde que se hace la medición, pero que por primera vez en la historia de esta ciudad, habían logrado siete días consecutivos sin homicidios.
Al contactarnos con la oficina de comunicación de la Alcaldía de Medellín nos explicaron que las mediciones de seguridad a las que hace referencia el alcalde se empezaron a aplicar en la ciudad desde 2003 por el Sistema de Información para la Seguridad y la Convivencia (SISC) y que los resultados de días consecutivos sin homicidios obtenidos antes solo habían sido de 5 días, unos en 2015 y otros entre 2019 y 2022.
Para el experto en seguridad y líder de gestión de proyectos de la línea de seguridad y justicia de la Universidad EAFIT, Andrés Preciado, estos logros en materia de seguridad en Medellín tiene varias explicaciones desde la gestión del sector público y las últimas administraciones desde los años 90. “Primero se debe reconocer que desde los años 90, las diferentes administraciones de Medellín han trabajado en coordinar acciones conjuntas entre la Policía, la Fiscalía y la Alcaldía”, explicó.
Además, Preciado afirma que la alcaldía de Sergio Fajardo fue fundamental para que en la ciudad se aumentara la tecnología para los temas de seguridad en el área Metropolitana y para implementar estrategias para trabajar con los jóvenes de las diferentes comunas más vulnerables de la capital antioqueña.
Preciado también detalla que las futuras administraciones deberán tener en cuenta que el comportamiento criminal cambia a medida que se implementan estrategias en la ciudad y que aunque hay menos homicidios, Medellín sigue teniendo problemas de seguridad muy marcados, como la extorsión y los hurtos los cuales siguen en aumento.
